lunes, 22 de julio de 2013

"God hates fangs" (and humans do it too)


HBO confirmó una séptima temporada para True Blood. Muchos se sorprendieron de la noticia ante los fuertes rumores de que la serie de Alan Ball sería levantada debido a los bajísimos ratings que dio en la quinta temporada y de los también bajos números de la sexta (actualmente en emisión). Las cifras habrían preocupado a la cadena HBO, quienes pensarían que los malos rendimientos se debe a la promoción de showrunner que Ball concedió a su principal guionista, Brian Buckner - rol que éste comenzó a ejercer desde el año pasado. El fin de la participación directa de Buckner en la historia de Sookie Stackhouse, sumado a las finales de la NBA y los altísimos números que dejó Game of Thrones luego de su tercera temporada, habrían sido el caldo de cultivo para lo que sería la culminación definitiva de True Blood. Sin embargo, la cadena de televisión privada salió a desmentir todo: reivindicó el lugar de la serie en la historia del canal, las altas cifras que todavía mantiene cada domingo y, finalmente, Michael Lombardo confirmó que la serie basada en la saga de Charlaine Harris seguirán su camino por una séptima temporada. 

En Veneno para Hadas bancamos todo lo que diga HBO aunque no sea del todo verdad. En efecto, es verdad que True Blood ha mantenido bajos ratings que -indefectiblemente- indican que tarde o temprano, todas las series llegan a su fin. No obstante, HBO siempre ha llevado hasta su verdadero final las series que han empezado, sin importar lo que dicten las cifras (por ejemplo, Big Love). Ahora bien, nunca estuve sorprendida de que la serie llegase a una séptima temporada, de hecho, era algo obvio: la mayoría de los actores casteados en la primer temporada (Anna, Alexander, Stephen, Rutina, Ryan, Sam, Carrie, Chris...) firmaron contratos para siete temporadas, por lo cual, la verdadera incógnita es ¿qué pasará luego de la séptima temporada? ¿se extenderá o finalmente las desventuras de Sookie Stackhouse & Cía. llegarán a su fin?

Los amores de Sookie todavía parecerían ni siquiera estar algo definidos. En la última (¿o cuarta?) temporada, ella afirmó que su decisión no iba a girar en torno a Bill y Eric puesto que ama a los dos. Tampoco creemos que se decida por Alcide ni Sam y mucho menos por Warlow. Por lo tanto, la decisión final -si es que existiera- girará en torno a Eric o Bill. Ya es demasiado tarde para que su decisión sea en torno a un humano, y más si tenemos en cuenta que en True Blood cada vez hay menos humanos y más criaturas extrañas.

A propósito de lo anterior, cabe destacar que en la ComicCon de San Francisco, el cast de True Blood se dio lugar entre superhéroes, muertos vivos y gente de mundos fantásticos. Allí, Buckner se hizo cargo del completo desfasaje que sufrió la serie desde hace dos temporadas. Durante la rueda de prensa, se le preguntó al showrunner si van a aparecer nuevas criaturas místicas, a lo cual, Buckner respondió que no, sino que el "show volverá a sus raíces". En esa dirección añadió: "Sé que tenemos un gran casting, pero vamos a condensar un poco las historias (...) Creo que la jodimos un poquito en el pasado y mi meta es traer a los personajes debajo del mismo paraguas argumental" 

Estamos muy de acuerdo con la sinceridad de Buckner y más que ilusionados por ver qué cambios llevará a cabo, ya que la última temporada ha remontado bastaaaaante bien en comparación a las anteriores. Por eso, en este blog, celebramos la noticia y queremos más temporadas de la gran True Blood, para que la serie del genio Alan Ball tenga un final digno y no a los sancazos forzados que dictan los números en la industria cultural. Para celebrar las buenas nuevas, hacemos un post donde repasamos en un top 6 las mejores temporadas y episodios de la serie vampírica de HBO. 

  1. Tercer temporada (2010, doce episodios) Sookie decide aceptar la propuesta de matrimonio de Bill con quien, pese a sus vaivenes, mantiene una relación desde el mismo comienzo de la serie. Pero cuando quiere comunicarle su decisión final, se encuentra con que él ha desaparecido, raptado por una banda de extraños. Denis O'Hare encarna al nuevo malo, Russel Egdington, el vampiro-rey de Missisippi, lo que incita a pensar que, el conflicto de la  temporada  gira en torno a  las relaciones de poder político (la primer temporada fue el racismo, la segunda la religión). Aquí aparece el licántropo Alcide Hearvoux, una especie de touch-and-go de Sookie y quien cruzará destinos con Russel debido a que la manada a la que pertenece su novia se encuentra  sometida a  los efectos de la sangre que les facilita el rey de Missisippi a cambio de su lealtad. Si la S03 comenzó con el definitivo amor de Sookie por Bill, culminará de forma contraria: con Sookie desconfiando de Bill y fantaseando con el vampiro vikingo Eric. Finalmente, un incidente le hará comprender cuál es la verdadera naturaleza de ésta rubia pueblerina y ahora sí, en definitiva, se abrieron los verdaderos caminos de la serie.  
  2. Primer temporada (2008, doce episodios) Tenía 18 años y vi la temporada completa en una noche. Literal. Desde el 2006 había un boom de libros de vampiros propiciados por Crepúsculo y consumidos con igual voracidad. En este clima, Alan Ball entró con True Blood, una de vampiros del HBO, lo cual implica sacarle toda ñoñez al fenómeno pero hacerlo igualmente rentable. Durante los primeros capítulos True Blood generó una polémica que, a contrapartida de lo esperado,  la volvía más y más atractiva: la serie de Ball arriesgaba constantemente con desnudos y un enorme contenido de sexo explícito entre Anna Paquin (Sookie) y Stephen Moyer, el vampiro Bill. Al poco tiempo, la serie que entró por la puerta chica de HBO, saldría como la vedette de la cadena televisiva. 
  3. Sexta temporada (2013, diez capítulos) Brian Buckner, guionista estrella y mano derecha de Ball, se estrenó como showrunner de la sexta temporada de True Blood, que actualmente se emite. Bill ha bebido toda la sangre de Lilith (S05) y se siente poderoso. Bill está completamente seguro de haberse convertido en una suerte de deidad destinada a salvar la raza de los vampiros del poder político y militar. Luego de los desastres que han llevado a cabo los vampiros contra los humanos en la anterior temporada, el gobernador de Lousiana, Burrel, se pone en campaña para erradicar a los vampiros y estudiarlos en un campo de concentración. Se dicta un toque de queda para ellos, se entregan armas sin consideración a policías incompetentes y la violencia crece. Ante los actos de violencia contra los suyos, Bill entiende que Lilith lo encomendó para salvar a su raza de ser calcinados ante el sol. Entonces intentará sintetizar sangre de hada para evitarlo. Warlow aparece y no es quien presume ser (y se parte como caño♥), Sookie conoce una verdad enorme de sus padres, Eric genera otro vampiro y las hijas de Terry sí que tomaron danonino. ¿Cuál será el destino que Burrel les preparó a los vampiros? ¿Quién es Bill? ¿Warlow está destinado a matar a su creador? ¿Sookie está destinada a la inmortalidad? No lo sabemos, pero sí podemos responder lo que realmente da asco de esta temporada: la disputa entre Sam y los lobos por Emma. Aburre y hastía, por lo cual, estamos seguros que ya se hará algo para remediarlo. 
  4. Segunda temporada (2009, doce capítulos)  Temporada de alto cuestionamiento a la religión y la más sexual de todas. Hay orgías y libertinaje en todos lados con la llegada de una extravagante mujer a Bon Temps. Tanto que espantó a muchos fans que antes se enviciaron con la 1er temporada. Jason se enlista en un culto católico que odia los vampiros y se prepara para matarlos en un campamento, Bill está lidiando con Jessica, el vampiro que creó cuando se vio en aprietos ante la autoridad y Eric Northman comienza a demostrar su importancia y gran atractivo dramático cuando conocemos a Godric, su mítico creador. La temporada gira en torno a las creencias, en quienes creemos, dónde depositamos nuestra fe, qué nos hace sentir fuertes y en quién nos anclamos durante los peores momentos.   
  5. Cuarta temporada (2011, doce capítulos) La temporada más rosada de la serie, donde los protagonistas exploran lo más profundo de su corazón y consciencia: Laffayette conoce a Jesús, Jason se enamora con Jessica, quien cree que los vampiros sólo sienten lujuria, Sookie se da cuenta de su amor por Eric, Arlene consolida el suyo con Terry, Andy se enamora de la bruja Holly. Todos se enfrentan a unas brujas que, de nuevo, quieren matar a los vampiros por sus crímenes. 
  6. Quinta temporada (2012, doce capítulos) Nos hayamos en el corazón de la máxima jerarquía política de los vampiros. Bill es rey de Louisiana pero buscado por la autoridad junto a Eric. Aparece una insulsa Nora -hermana  vampiro del rubio nórdico-  Pam convierte su primer vampiro, Tara se salva de su trágico destino y echa a Sookie de su vida, Jason y Jessica traicionan al pobre Hoyt, aparece una biblia creacionista para vampiros y todos quieren a Lilith. Las traiciones están a la orden del día y cualquier paso en falso conlleva la muerte. Es acá cuando los hombres lobos y cambiaformas no encuentran lugar en la serie. Olvidable. Muy olvidable. 


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